Mark Strand (Summerside, Isla del PrĂncipe Eduardo, 11 de abril de 1934 – Nueva York, 29 de noviembre de 2014)
VersiĂłn: IsaĂas Garde
Porque hemos cruzado el rĂo y el viento solo ofrece un insensible despliegue de frĂo y nos hemos adaptado con resignaciĂłn, sin esperar más que lo que nos ha sido dado, ni preguntarnos cĂłmo fue que vinimos a este lugar; no nos importa que nada haya resultado como esperábamos. No hay modo de despejar la bruma en que vivimos, no hay modo de saber que hemos soportado otro dĂa. La nieve silenciosa del pensamiento se funde antes de poder afirmarse. El lugar donde estamos es una conjetura. Las puertas hacia ninguna parte se multiplican y el presente está tan lejos, tan hondamente lejos.
Bury Your Face in Your Hands
Because we have crossed the river and the wind offers only a numb uncoiling of cold and we have meekly adapted, no longer expecting more than we have been given, nor wondering how it happened that we came to this place, we don’t mind that nothing turned out as we thought it might. There is no way to clear the haze in which we live, no way to know that we have undergone another day. The silent snow of thought melts before it has a chance to stick. Where we are is anyone’s guess. The gates to nowhere multiply and the present is so far away, so deeply far away.
Publicar un comentario